El cirujano
valenciano Pedro Cavadas tiene ante sí un nuevo reto. Si en 2008 fue el
primer trasplante bilateral de brazos por encima del codo hecho en
España, y el año pasado, el primer implante de cara, ahora espera
acometer el primer trasplante bilateral de piernas. Esta vez, además,
será la primera operación de estas características en el mundo. Así lo
confirmó ayer la Organización Nacional de Trasplantes (ONT), dependiente
de Sanidad, que informó de que ha dado el visto bueno a la solicitud
del Hospital La Fe de Valencia y de Cavadas para intervenir a un
paciente con una amputación doble.
La decisión fue adoptada ayer por la Comisión de Trasplantes del Consejo
Interterritorial del Sistema Nacional de Salud. El informe destaca que
el paciente «carece de alternativa», pues no puede llevar prótesis. La
operación se llevará a cabo en cuanto se encuentre un donante
compatible, y se realizará en colaboración con la Fundación Cavadas, que
pondrá los cirujanos, y La Fe, de donde saldrá el resto del personal
sanitario.
Joven y mentalizado
El coordinador de la ONT, Rafael Matesanz, señaló ayer que el paciente
–del que no se ha hecho público ningún dato personal, ni siquiera el
sexo ni la edad– «es una persona joven, porque si fuera mayor tampoco
estaría indicado el trasplante, pues la recuperación va a durar mucho
tiempo». Además, destacó que está «mentalizado» y que ha sido sometido
«a una evaluación psicológica», algo que en estos casos es «crucial»,
pues se enfrentará a una larga y dura rehabilitación.
Lo paradójico de este caso es que la intervención será más sencilla que
la de otros trasplantes de tejidos compuestos experimentales practicados
en España. «Técnicamente no es tan complejo como un trasplante facial
ni uno de brazos. Incluso fue más complicado el reimplante de pierna que
llevó a cabo Cavadas», explica Matesanz. Sin embargo, no se ha hecho
antes, ni es probable que la técnica se generalice, «porque tiene una
indicación muy limitada», además de un largo postoperatorio. El
responsable de la ONT asegura que «hay corredores que desarrollan unas
velocidades tremendas con una prótesis de piernas», por lo que, en la
mayoría de los casos, es la solución que se adopta. Pero este paciente
está amputado muy por encima de la rodilla, por lo que «no tiene
músculos para mover las prótesis y no consigue deambular con ellas».
Así que, después de conocer los riesgos, y ante la única alternativa de
moverse en silla de ruedas, el paciente ha aceptado ser el primero en
someterse a esta intervención. La recuperación será más larga «por una
cuestión de longitud», según Matesanz. Los cirujanos unirán los huesos,
la piel, las arterias y las venas. Pero los nervios tienen que «crecer»
desde el muñón y llegar a la nueva extremidad. A una velocidad de
crecimiento aproximada de un milímetro al día, tal y como calcula ONT,
la recuperación se prolongará durante meses.
Con éste, además de los tres de brazos y los tres de cara, serán siete
los trasplantes de tejidos compuestos hechos en España.
ANÁLISIS
Un riesgo y una esperanza para
otros
- ¿Por qué no se han llevado a cabo antes trasplantes de
piernas?
––El trasplante de extremidades inferiores no es más complejo que el de
brazos o el de cara, pero está indicado en muy pocos casos. No se habría
llevado a cabo si el paciente tuviera amputada una sola pierna o la
amputación hubiera sido más baja.
- ¿Se generalizará esta técnica en el futuro?
––No es probable, al menos a medio plazo. De momento, se trata de una
técnica experimental, como los trasplantes de cara y de brazos, que
necesita autorización específica para cada caso. Pero, además, sólo se
optará por el trasplante cuando otras opciones, como las prótesis, hayan
fallado. De todos modos, pese al riesgo, la operación es una esperanza
para miles de personas condenadas a una silla de ruedas.